¿Ángel de la paz o transhumanista? Las dos caras de Elon Musk
El multimillonario Elon Musk entra en la sede del servicio de mensajes cortos Twitter. Anuncia a bombo y platillo en inglés a la conmocionada dirigencia liberal de izquierda que ha completado la compra de Twitter tras una larga batalla legal. Una foto suya entrando en la sede con un fregadero en los brazos va acompañada de sus palabras "¡Que se hunda! (¡Dejen que lo asimile!) en todo el mundo. Los periodistas y políticos políticamente correctos dieron rienda suelta a su rabia y desesperación, al igual que los activistas antiglobalización se alegraron. Musk, que liberó simbólicamente al pájaro azul de Twitter, ha sido considerado desde entonces como un defensor de la libertad de expresión. Logró una hazaña similar a los ojos de muchos opositores a la globalización con su llamamiento público para que Occidente inicie negociaciones de paz con Rusia, reconozca a Crimea como rusa y celebre votaciones supervisadas por la ONU en las regiones ocupadas.