Detención de Lula da Silva tras anunciar su intención de presentarse a la Presidencia de Brasil

Sábado, 5 Marzo, 2016 - 16:00

El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva fue detenido por orden de "conducción coercitiva" del juez federal de  Curitiba, Sergio Moro.

El Instituto Lula criticó este viernes la detención del líder del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, y la calificó como "arbitraria, ilegal e injustificable".

El Instituto Lula asegura que el hecho representa una agresión al Estado de derecho del expresidente brasileño.

El Instituto Lula criticó este viernes la detención del líder del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, y la calificó como "arbitraria, ilegal e injustificable".

En horas de la mañana la Policía Federal de Brasil allanó la residencia del expresidente de esa nación, Luiz Inácio Lula da Silva, quien posteriormente fue llevado a rendir declaraciones en calidad de detenido, por el caso de corrupción en Petrobras.

"La violencia practicada hoy contra el expresidente Lula y su familia, contra el Instituto Lula, la exdiputada Clara Ant y otros ciudadanos ligados al expresidente, es una agresión al Estado de derecho que afecta a toda la sociedad brasileña", aseguró la organización en un comunicado.

Tras la detención del dirigente del PT, el MPF informó la organización política podría haber recibido entre 20,7 y 35 millones de reales (unos 5,5 y 9,4 millones de dólares) de las empresas que formaron la red corrupta que operaba en la semiestatal Petrobras: Camargo Correa, OAS, Odebrecht, Andrade Gutierrez, Queiroz Galvao y UTC.

Estas acusaciones fueron ignoradas por el Instituto Lula e insistió en que "la acción de la Lava Jato es arbitraria, ilegal e injustificable, además de constituir una grave ofensa al Tribunal Supremo Federal (TSF)".

El presidente del Instituto Lula, Paulo Okamoto, también resultó apresado debido a su estrecha relación con los hechos atribuidos al expresidente.

Desde que el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva anunció su intención ser candidato a la presidencia en las próximas elecciones, la oposición activó una nueva fase de la investigación que busca dañar su imagen.

En total, 44 personas son objetivo de esta nueva fase de Lava Jato y "Aletheia", un término griego que significa "búsqueda de la verdad".

Los medios de comunicación privados estaban enterados desde la madrugada de la operación.

Analistas advierten que detrás de la operación efectuada hoy están los intereses de EE.UU. y las transnacionales por privatizar las riquezas naturales de Brasil, así como la intención de desprestigiar al Partido de los Trabajadores (PT) de cara a las elecciones presidenciales de 2018.

El pasado fin de semana el expresidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, manifestó que si el Partido de los Trabajadores (PT) lo consideraba necesario él podría ser candidato para las elecciones presidenciales de 2018. El lunes presentó por escrito su defensa ante la fiscalía de Sao Paulo por las acusaciones en su contra y se puso a la disposición del órgano para suministrar la información necesaria.

Sin embargo, la Policía Federal lo detuvo este viernes para llevarlo a rendir declaraciones. Los analistas coinciden en que esta acción forma parte del espectáculo al que está acostumbrado el juez que lleva el caso y busca desprestigiar la imagen del líder de Brasil, así como la del PT de cara a las elecciones presidenciales de 2018.

El politólogo Juan Manuel Karg manifestó que la detención es una maniobra que tiene que ver más con los medios de comunicación y con una parte de la justicia brasileña que con la causa Lava Jato, porque hace 15 días cuando él iba a declarar y presentó un pedido para postergar su declaración y preparar mejores elementos para su defensa éste fue aceptado.

Luego se da el allanamiento a su residencia este viernes y la detención, aún cuando él nunca se negó a declarar. En este sentido, Karg considera que esta acción es muy grave porque se detuvo al expresidente del propio Gobierno que está en funciones lo que evidencia que hay una distancia entre el poder judicial y el Gobierno que, en otros casos, podría ser sana y natural.

Evitar candidatura en 2018

Recordó que Lula es uno de los presidentes mejor valorados de la historia de Brasil. Su gestión logró sacar de la pobreza a 28 millones de ciudadanos. La detención es un montaje que tiene que ver con la intención de que Lula no pueda presentarse en las elecciones de 2018.

El analista manifestó que el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), antagónico del PT, quiere volver al poder para ejecutar una política económica distinta que incluye dejar de financiar los programas sociales.

Este ataque, además, va más allá de Brasil y es similar a los que se están dando en contra de la expresidenta de Argentina, Cristina Fernández, de Evo Morales en Bolivia y de Nicolás Maduro en Venezuela, afirmó.

Por otra parte, tiene que ver con una noción de las fuerzas conservadoras de que Brasil es la primera economía de América del Sur y su política define mucho lo que sucede en otras latitudes del continente.

"Me parece que detrás de esta decisión también está la intención de dar un zarpazo final contra los gobierno posneoliberales tras la victoria de la derecha en Argentina, en la elección de medio término en Venezuela y en el referendo en Bolivia", aseveró Karg.

¿Qué hay detrás de los ataques contra el PT en Brasil?

Asimismo, indicó que este año se votarán alcaldías en Brasil y hay un trasfondo de erosionar aún más al PT, que ha sido el partido más vapuleado en la última década por los medios de comunicación.

"Van a intentar sacar a Lula de competición y si no lo logran van a mentir sobre él, van a erosionar su figura para tratar de llegar en mejores términos a la elección presidencial", dijo.

Reiteró que su posible elección en 2018 abriría la posibilidad para un nuevo mandato de Cristina Fernández en Argentina y eso es lo que las fuerzas de oposición y la derecha internacional intenta evitar.

El show mediático antes que todo

El analista Beto Almeida subrayó que esta medida es parte la espectacularización de la noticia y que incluso los medios de comunicación privados sabían de la detención antes de que ocurriera.

Además, señaló que tras la medida también está el interés de diversos sectores del país y del mundo de privatizar las riquezas naturales de la nación.

Mencionó que no hay duda de que la Policía Federal tiene entrenamiento de la Oficina Federal de Investigación estadounidense (FBI, por su sigla en inglés) y que el Poder judicial actuó en conexión con los procuradores judiciales de Estados Unidos, por lo tanto, existe la posibilidad de que se esté montando un falso positivo en términos jurídicos.

En contexto ​

Desde que salió a la luz pública el caso de corrupción en Petrobras, la oposición brasileña pretende vincular a la presidenta Dilma Rousseff y a los miembros del PT en este caso para solicitar su destitución.

A juicio del periodista y sociólogo brasileño Laurindo Leal, la derecha de su país está jugando todas sus cartas para sacar del poder al Partido de los Trabajadores (PT), tras el anuncio que hizo el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva de volver a lanzarse como candidato en las próximas elecciones.

La oposición implementa acciones como el querer vincular a Rousseff y a Da Silva en el caso de corrupción de Petrobras, pero sus acciones no han salido como lo esperaban.

Así quedó demostrado luego de que la comisión parlamentaria brasileña, encargada de la investigación de corrupción en la petrolera estatal, eximiera a ambos líderes de toda responsabilidad en el caso al no encontrar pruebas en su contra.

Fuente: El Espía Digital.