La ONU "condena" la destrucción sistemática de la ayuda humanitaria por parte de Israel

El coordinador humanitario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en los territorios ocupados palestinos, Robert Piper, explicó el miércoles que los hechos se produjeron esta vez en el barrio de Jabal al-Baba de la aldea palestina de El-Azarie, al este de Al-Quds (Jerualén).

Naciones Unidas repudió la demolición y la confiscación por parte del régimen sionista de las estructuras humanitarias establecidas para los palestinos, ya que a pesar de que la ley internacional obliga a Israel a facilitar el paso rápido y sin impedimento para asistir a los necesitados, la ayuda humanitaria dirigida hacia las comunidades vulnerables como Jabal al-Baba sigue bajo ataques sistemáticos, constantes y crecientes.

Tras pedir a las autoridades del régimen de Tel Aviv que dejen de crear obstáculos en las vías del suministro de la ayuda humanitaria a los palestinos, el funcionario de la ONU exigió una vez más al reǵimen sionista de ocupación que respete los derechos de las comunidades más vulnerables palestinas y que las dejen en paz.

La Oficina de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios adivirtió por su parte de que la sistemática destrucción de las viviendas y estructuras palestinas impone “presiones” sobre los lugareños, además de violar flagrantemente el Cuarto Convenio de Ginebra de 1949 que vela por la protección debida a las personas civiles en tiempo de guerra.

Dicha oficina, en un comunicado emitido el pasado domingo, especificó que las autoridades israelíes ordenaron la destrucción de siete casas de palestinos y la confiscación de los bienes pertenecientes a otras tres familias palestinas. Con esta medida los israelíes dejaron sin techo a nueve familias palestinas, compuestas por 40 miembros, de esa cifra, 22 son niños.

Este organismo pro derechos humanos anunció que en lo que va de año, los israelíes han demolido o confiscado 600 estructuras en Cisjordania. Esta cifra supera la del año 2015. Tales medidas, de acuerdo con la OCHA, han afectado a unas 2500 personas, mientras que otras 900 han sido desplazadas.

Pese a la evidente política sistemática y deliberada de acoso contra la población palestina con objeto de erradicar su presencia sobre el territorio ocupado y poder sustituirla con asentamientos de colonos judíos, no se esperan sanciones ni mayores condenas por parte de la comunidad internacional.