Hungría ha rescatado a la UE de la capitulación ante Turquía

Los temas principales de la cumbre

La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que el foco de la cumbre debería estar sobre las siguientes cuestiones: "A qué proyectos de asistencia a los refugiados en Turquía asignaría Bruselas los tres mil millones de euros; cómo proteger las fronteras exteriores de la UE; cómo la UE puede ayudar a Grecia en la difícil situación actual con los inmigrantes". La prestación de tres mil millones de euros se ha acordado hace unos meses, pero la UE retrasa el préstamo de estos fondos a Turquía.

La desconfianza de la UE

Entre los líderes europeos no hay ninguna seguridad de que el dinero se gastará de la manera especificada. El presidente checo, Milos Zeman, antes de dirigirse a la cumbre, dijo que se opondría a la asignación de tres mil millones de euros a Turquía. Según él, los turcos no sólo son incapaces de detener el flujo de inmigrantes que llegan a Europa, sino que tampoco quieren hacerlo.

Según nuestras fuentes, Turquía está usando deliberadamente a los refugiados como un instrumento de presión sobre la UE. A mediados de febrero, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, amenazó con abrir las fronteras con los países de la UE a los refugiados. Y parece que esta táctica funcionó. En la víspera, la canciller alemana, Angela Merkel, prometió a Turquía acelerar el proceso de aceptación de este país como miembro de la Unión Europea. Merkel declaró que Turquía puede adherirse a la UE tan pronto como se resuelva la crisis migratoria.

El chantaje de Turquía

Esta vez, los turcos también utilizaron su habilidad para agravar la crisis migratoria en Europa para promover sus propios intereses. En particular, la parte turca exigió otros tres mil millones de euros para hacer frente a los problemas de los inmigrantes. Además, Turquía ha exigido a la UE introducir un régimen libre de visados para este mes de julio, y no para octubre, como estaba previsto con anterioridad. Ankara también exigió acelerar las negociaciones de adhesión a la UE.

A cambio, Turquía ha ofrecido aceptar a todos los refugiados que tratan de llegar a Europa utilizando la ruta de los Balcanes, desde una fecha determinada. Además, Turquía está dispuesta a aceptar a todos los refugiados que se encuentran en las islas del mar Egeo, en Grecia. A cambio, la UE debería tomar el mismo número de refugiados de Turquía y distribuirlos por los países miembros.

Los líderes de la UE dan la bienvenida a este plan, pero no todos los países están convencidos de adoptarlo. La UE también quiere asignar a Turquía una suma de dinero inferior.

El fracaso de la misión de Tusk

En la víspera de la cumbre, el Presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, visitó Turquía, y antes, Grecia y los países balcánicos, quienes junto a Austria cerraron sus fronteras a los inmigrantes. Uno de los temas más debatidos fue el posible cierre de la ruta del tráfico ilegal de los refugiados a través de los Balcanes hacia la UE. Esto demuestra que Tusk no pudo alcanzar un acuerdo con Austria, Croacia, Eslovenia, y los dos estados que no están incluidos en la UE - Serbia y Macedonia-, sobre la posibilidad de abrir las fronteras a los inmigrantes.

Esto crea problemas a Grecia, donde se acumula un gran número de refugiados que no pueden entrar en los países ricos de Europa. Con el fin de resolver el problema griego es necesario crear mecanismos para un control más estricto en las fronteras exteriores de la UE. Principalmente, en la frontera marítima de Grecia con Turquía.

El veto de Hungría

Si los turcos ofrecen una solución, pоr la cual la UE tendrá que pagar un alto precio, el tema de la redistribución de los inmigrantes permanece. Los países de Europa del Este están contra esta medida. Hungría ya ha anunciado que celebrará un referéndum sobre la cuota de adopción de inmigrantes que le impuso la UE. Esta medida puede repetirse en Eslovaquia, los países bálticos y Polonia, opuestos a los planes de redistribución de inmigrantes de Oriente medio en sus países. Se ha informado de que fue Hungría quien vetó la oferta turca por no estar de acuerdo con los planes para el reasentamiento directo de los inmigrantes de Turquía en los países europeos.

De las 160.000 personas que la UE ha "accedido" empezar a redistribuir, Alemania está dispuesta a aceptar 40.000 personas; Francia 30.000, y Portugal 10.000. El destino de los otros refugiados se desconoce. El primer ministro británico, David Cameron, dijo anteriormente que su país no participará en estos planes, ya que goza de un estatus especial en la UE.

Paralización de la voluntad

Los países de la UE prefieren resolver el problema de los imigrantes por su cuenta, bloqueando las fronteras dentro de la UE e introduciendo controles de pasaporte. De hecho, esto cancela la libre circulación entre los Estados de la Unión surgida tras la firma de los acuerdos de Schengen. Están obligados a dar estos pasos ya que la UE no puede ofrecer una política eficaz para contrarrestar la amenaza de la inmigración.

Por otra parte, el flujo de inmigrantes no se percibe como una amenaza por parte de la élite gobernante. Ellos están listos para recibir a los refugiados de Turquía directamente. En este caso, no hay valla que pueda proteger a ningún país de la UE de los inmigrantes. Las cuestiones relativas a la identidad de los "nuevos euorpeos" son totalmente ignoradas, ya que tradicionalmente este factor no ha sido tenido en cuenta en el marco de la ideología liberal dominante en Europa.