Los sindicatos franceses extenderán la huelga a todas las plantas nucleares en Francia

Jueves, 2 Junio, 2016 - 20:00

Sindicatos franceses planean llevar la huelga al sector de la energía incluyendo todas las plantas nucleares como parte de las protestas nacionales contra las reformas laborales.

"Todas las plantas de producción de energía votaron a favor de la huelga a partir del jueves. Las 19 plantas nucleares votaron a favor de la huelga. Vamos a empezar esta noche recortar la producción de energía a partir de las 19.00", dijo el funcionario del sindicato CGT Laurent Langlard.

La huelga será poco probable y terminará en apagones ya que existe una norma que obliga a los sindicatos a mantener un nivel mínimo de salida lo que evita las interrupciones.

Sin embargo, el EDF, la empresa de generación de energía eléctrica nuclear de Francia, podría verse forzada a aumentar sus importaciones de electricidad de países vecinos para compensar la escasez.

Francia produce alrededor del 75% de su electricidad de la energía nuclear. El resto se deriva de los combustibles fósiles y la energía renovable.

Langlard dijo que, además de las centrales nucleares, centrales hidroeléctricas y las alimentadas por combustible también votaron a favor de la huelga.

Anteriormente, los pilotos de Air France anunciaron que estaban planeando un paro durante un máximo de cuatro días a finales de la próxima semana.

Las huelgas en el sector del transporte pueden crear perturbaciones de los masivos viajes ya que se inicia el torneo de fútbol Eurocopa 2016 con un mes de duración.

La semana pasada, los trabajadores del sector del aceite también se unieron a la huelga nacional, que dio lugar a cierres de refinerías, el bloqueo de los depósitos de combustible y la interrupción del suministro de combustible.

París dice que las reformas laborales apuntan a impulsar la economía del país y frenar la alta tasa de desempleo.

Los manifestantes y los sindicatos de trabajadores, sin embargo, dicen que el gobierno quiere que sea más fácil y menos costoso para los empleadores para despedir a los trabajadores, denominando las reformas como un ataque a los derechos laborales.

El gobierno francés se ha negado a descartar el proyecto de ley, con el primer ministro Manuel Valls diciendo que no cederá a las protestas.

El presidente, Francois Hollande, también ha subrayado en repetidas ocasiones que el paquete de reformas no se retiraría a pesar de una fuerte oposición y numerosas protestas.