Cumbre de Seguridad Nuclear sin Rusia ni Irán y con el Daesh en el centro de atención
La cita está marcada por la ausencia, este año, de Rusia e Irán. Tampoco está Corea del Norte.
¿Cómo evitar que caiga material atómico en manos de grupos terroristas? Representantes de más de medio centenar de países discuten sobre esta y otras preocupaciones en la Cumbre de Seguridad Nuclear que ayer comenzó en Estados Unidos.
Oficialemnte, en el punto de mira de Barack Obama, que impulsó estas cumbres en el año dos mil nueve, está el Dáesh. La posibilidad de que los yihadistas ataquen una central atómica o traten de conseguir material nuclear para fabricar bombas sucias está sobre la mesa.
La subsecretaria de Estado para el Control de Armas, Rose Gottemoeller, explica que “en muchos países, no es un crimen poseer material nuclear para venderlo. Así que hemos puesto mucho énfasis en mejorar nuestra capacidad de localizar el material de contrabando, encontrar a los contrabandistas nucleares y llevarlos ante la justicia”.
La administración Obama afirma que para los terroristas es más difícil que nunca adquirir materiales nucleares. Sin embargo, la cumbre incluye una conferencia especial sobre grupos que, como el Daésh, han actuado en zonas urbanas de todo el mundo, una clara señal de que todavía se vislumbra una amenaza terrorista nuclear.