Dugin's Guideline Nº 99: Nos convierten en conejillos experimentales

23.07.2020

Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera

· La época del coronavirus y el aislamiento ha demostrado algo importante: primero, el sistema capitalista global, que triunfó después de la caída de la URSS, es ineficaz para hacer frente a estos serios desafíos para la humanidad. No se le dio ninguna respuesta inteligible al desafío.

· Todos están insatisfechos: ni aquellos para quienes las condiciones de cuarentena parecían difíciles, ni aquellos para quienes parecían demasiado leves, ni aquellos que no sufrieron la cuarentena (como en Suecia). No hicimos frente al virus, como todos los demás. El descontento en Rusia con las medidas es un hecho sociológico. Tal vez fuimos más efectivos que muchos, pero en la mente de la sociedad rusa, todo se hizo mal.

· Las autoridades cometen errores y hacen algo bien, pero el estado de ánimo de la gente seguía insatisfecho. Habla más bien de la actitud de las personas y la sociedad hacia las autoridades.

· En condiciones de autoaislamiento, la sociedad de repente vio la distancia entre ellos y las autoridades. La sociedad ha notado que algo anda mal con las autoridades.

· Nos enfrentamos a una bifurcación: la primera opción es que los ánimos de protesta crecerán ("cambiar el gobierno"). El liberalismo como base de la protesta está condenado. Si la protesta se vuelve completamente independiente en su insatisfacción con el gobierno como tal, sería completamente diferente. Entonces no será necesario reprimir a los agentes de influencia, pero el Estado tendrá que actuar contra la gente. Pero esta es la forma más equivocada y terrible: como, por ejemplo, durante el colapso de la URSS, no condujo a nada bueno. Pero también es imposible esperar al régimen tal como es: esto lleva al servilismo con una pérdida final de dignidad.

· Debemos comenzar a auto-organizar nuestra sociedad. Vemos cuán tóxicas son las ciudades y los apartamentos, y cuán fácil es mantener dictaduras en áreas metropolitanas. Las regiones y el campo son nuestra salvación, incluso del Estado en el camino en el que se está moviendo ahora. Tal vez la unión de los consejos regionales, etc.

· Dejemos que el estado viva su propia vida y el pueblo la suya. Una vida de auto-organización es esencial. "No confíes en los príncipes ni en los hijos de los hombres, en quienes no hay salvación". La salvación está en los Dioses, en Iglesia, en el pueblo y en la tierra.

· Mientras estamos divididos, y en la ciudad estamos divididos, somos esclavos del Estado. Incluso si pensamos que somos hipsters y sin estilo, esto no es más que una ilusión. El coronavirus nos ha demostrado cuán mecanicista es la vida humana en la ciudad.

· Si tenemos que elegir entre la protesta y la auto-organización, elijamos lo último. Debemos restablecer los lazos con nuestro propio pueblo, este es el único camino de salvación.