Armenia está en el punto de mira

09.08.2016

Los presidentes ruso y armenio, Vladimir Putin y Serzh Sargsyan, sostendrán una reunión hoy en Moscú. Las principales cuestiones a tratar versarán sobre la cooperación bilaterall y la solución del problema de Karabaj.

Contexto global

Para Rusia, esta reunión es esencial debido a que debe consolidar los resultados de las dos reuniones anteriores, con Erdogan en San Petersburgo, y en Bakú, donde se discutió la creación de la alianza continental euroasiática con Aliyev y Rouhani. De Armenia dependen muchas decisiones y Rusia utilizará todos los elementos de la persuasión para que la parte armenia acepte el plan, que es tan impopular.

Plan de paz

Para Moscú es fundamental convencer a Erevan de aceptar un plan de paz que implique la transferencia a Azerbaiyán de las cinco regiones ocupadas por las fuerzas militares de Nagorno Karabaj y Armenia (el llamado "plan Lavrov"). Estas áreas no están incluidas en la parte formal de la república no reconocida. Cómo cree Moscú, la transferencia de las cinco áreas debería abrir el camino para el ingreso de Azerbaiyán en la Unión Euroasiática, de la cual Armenia ya es miembro. En la víspera, Vladimir Putin mantuvo una reunión con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y anteriormente con los líderes de Irán y Azerbaiyán, Rouhani y Ilham Aliyev. En esta reunión también fueron discutidas las cuestiones de la integración euroasiática de Azerbaiyán, y el plan de Rusia para una solución pacífica en Nagorno-Karabaj.

La oposición de Estados Unidos

La existencia del plan ruso es utilizado por las redes de influencia estadounidenses, que juegan con los sentimientos nacionalistas de los armenios para encender un estado de ánimo revanchista, tratando de demostrar lo pernicioso de una alianza con Rusia. No se excluyen nuevos intentos de desestabilizar la situación en el país, ni provocaciones por parte de los nacionalistas armenios para fomentar el conflicto de Karabaj. Una reacción negativa hacia el plan ruso sólo conducirá a la desestabilización de la situación en la región, y a una posible guerra.