Se espera que los participantes en el foro - más de 250 ministros y altos funcionarios, responsables de tomar decisiones importantes en el sector energético en países como Irán, Arabia Saudita, Irak, Emiratos Árabes, Jordania, Venezuela, Alemania, Suiza, Bulgaria, Argelia, Nigeria, Sudán, Etiopía, Tanzania Argentina, Bolivia y Uruguay - se reunirán en el Congreso para formar la agenda energética global.
Durante la ceremonia de apertura, el ministro de Energía de Turquía, Berat Albayrak, dijo que el lema del foro es "Energy for Peace" (Energía para la Paz), que puede entenderse de varias maneras: como "pacífica", y como "la creación de unas buenas relaciones de vecindad", lo cual es importante en el contexto de lo que podría ser uno de los eventos centrales, la firma del acuerdo ruso-turco "Turkish Stream", y la construcción de la planta de energía nuclear "Akku", proyeto del cual el ministro de energía ruso, Alexander Novak, en una entrevista con los medios de comunicación turcos, ha dicho que es el camino más corto para la normalización de las relaciones bilaterales.
A pesar del hecho de que el foro contará con la presencia de varios jefes de estado, la atención del público y los medios de comunicación se centra en la visita a Estambul del presidente ruso, Vladimir Putin. Esta es su primera visita al país después del incidente con el avión ruso. Anteriormente, después de las disculpas oficiales por parte de Turquía, los dos líderes se reunieron varias veces: en China y Rusia.
Además de reunirse con Recep Tayyip Erdogan, Vladimir Putin se reunirá en Estambul con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien declaró este fin de semana que Venezuela que la base de su economía estará basada en la producción de petróleo y gas, todavía muchas décadas más.
Además, el pasado fin de semana se han firmado varios contratos en el sector energético entre Rusia, Venezuela y España. Sin embargo, es probable que la discusión no sólo se limite a eso, sino que también a la inestable situación política en Venezuela, debido a las acciones de la oposición pro-estadounidense, que el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ha tildado como inadmisibles en un comunicado. Es posible que se diseñe un plan en sentido contrario para debilitar la influencia de Washington en la región.
La atención especial sobre la figura del presidente Putin durante este Congreso Mundial de la Energía puede expliucarse. Rusia ha sido y sigue siendo una potencia energética, incluso de un "nuevo tipo", lo que implica no sólo el primer lugar en la extracción del petróleo y el gas, y el segundo en las reservas de carbón, sino también un mayor arsenal nuclear, y la construcción de centrales nucleares de alta tecnología en todo el mundo.
Y a la luz de los acuerdos recientemente rotos con los Estados Unidos, incluso en la esfera nuclear, Moscú tiene todas las posibilidades de crear su propia energía innovadora.
Anteriormente, la palma en innovaciones en este campo se la llevaba Japón, con el que también este fin de semana se obtuvieron varios acuerdos importantes que aún no han sido firmados. Tokio tuvo que detener sus proyectos debido al peligro sismológico y, en consecuencia, al alto costo de mantenimiento de la innovadora central eléctrica. A pesar del hecho de que el comienzo del desarrollo de este proyecto fue hace más de diez años, en el mundo no existen tales estaciones y Moscú podría adoptar algunas innovaciones japonesas en este campo.
Además, se llegó a un acuerdo con Japón sobre la financiación de la producción de gas natural por los productores rusos en el Mar del Norte. Recordemos que hasta el momento, la extradición de gas se realiza sólo en el ártico continental.
Todo esto, sin duda, conduce a Moscú a un nuevo nivel, no sólo en los campos energéticos, sino también en la política mundial.