Estados Unidos: entre la Guerra civil mundial, la "Gobernanza global" y el nuevo orden internacional

05.11.2020

Sin dudas las elecciones en Estados Unidos serán las más importantes de los últimos años y las que marcarán al siglo XXI definirá el rumbo que tomará la principal potencia del mundo, de allí las implicancias geopolíticas futuras, la importancia de esta elección radica en las radicales diferencias y concepciones ideológicas, políticas y teológicas de los competidores y a quienes representan, eventualmente son más las preguntas que las respuestas ¿Será vencedora la posición realista que pone como actor principal del sistema internacional a los Estados-Nación o avanzará el liberalismo hacia un globalismo total reformulando y reforzando a los organismos internacionales? ¿Se mantendrá la alianza táctica con la Rusia de Vladimir Putin o el Deep State intentará ir una vez más a quien considera su enemigo natural? ¿Continuarán los acuerdos comerciales con China y las cartas entre Trump y Kim Jong-un o se romperán las relaciones con el comunismo? ¿Seguirán los acuerdos de paz entre Israel y los países árabes o Hillary Clinton volverá a las andadas? ¿Se conservará la política de no incursión militar o los "señores de la guerra" y el complejo militar encontrarán un nuevo chivo expiatorio?

Nuevo orden internacional

La crisis del coronavirus ha impactado a nivel global con las consecuencias devastadoras de una guerra, con la caída de las economías, parálisis del comercio, incertidumbre bursátil y pánico social, todo ello en medio de un año electoral en EEUU donde de no haber tenido lugar este evento Trump sería reelegido cómodamente. Hoy Estados Unidos parece 

dejar atrás esa crisis con una recuperación inusitada, pero lo que realmente está en juego es el rol y el poder que tendrá en la configuración de un nuevo orden internacional post pandemia ¿Será junto a China, Rusia, Alemania, India y Japón quien impulse un mundo multipolar con eje en los Estados como actores principales? ¿acelerará la competencia con China en un bipolarismo tecnológico con la división del mundo en zonas conectadas y no conectadas? ¿O aspirara al modelo de gobernanza global con el fortalecimiento de organismos supranacionales y multilaterales? De lo que no hay dudas es que seguirá siendo el actor central en el nuevo ordenamiento mundial.

Gobernanza global

La última alternativa parece la más previsible de ganar Joe Biden, la concreción del proyecto globalista y las élites plutocráticas, la "gobernanza global" ligada al mercado único mundial "Un gobierno, un mercado". El capitalismo absoluto sin ningún tipo de límites, ya no sólo como proyecto económico o como proyecto político sino como proyecto socio-cultural y proyecto transhumanista. Un tecnocapitalismo de las corporaciones globales las Big five, Google, Amazon, Facebook, Apple, Microsoft -las GAFAM- (Walter Formento). Una sociedad poscapitalista regida por la explotación de datos, la inteligencia artificial, robotización, automatización y biotecnología, a grandes rasgos. ¿Será lo que reste del siglo XXI la transición hacia un nuevo ordenamiento para una sociedad transhumanista, transcapitalista y transnacional?.

Guerra Civil Mundial 

Se le atribuye a Bertolt Brecht la frase: "La crisis se produce cuando lo viejo no acaba de morir y cuando lo nuevo no acaba de nacer". La crisis de la pandemia es eso, como la etimología de la palabra pandemia lo indica (Pan= Todo; Demos= Pueblo) una crisis total. Donde no puede terminar sino en una Guerra total como ya lo preveía Carl Schmitt, la pérdida de la autoridad estatal, por ende el fin de la estatalidad, deriva en una guerra de todos contra todos en el Homo homini lupus de Hobbes un Estado de naturaleza

Dirá Schmitt de “guerra civil mundial” (weltbürgerkrieg).

Las escenas que se reproducen en Europa de lucha callejera entre el pueblo (comerciantes, trabajadores despedidos e independientes) frente a la Policía por los toques de queda y la imposición del Estado de excepción, ante la "segunda ola", por parte de los gobiernos, ya sin ninguna legitimidad popular, pueden ser sólo un preámbulo de las consecuencias que traerá el "Gran reseteo" como ha denominado el World Economic Forum de Davos a la iniciativa para "reconstruir” el sistema económico y social global de la (oportuna) crisis del Coronavirus con un "Nuevo contrato social" el cual trae bajo el brazo la idea de una renta mínima universal, para evitar un estallido social planetario; la transición hacia una "Economía verde", esto es el paso de combustibles fósiles a energías renovables que traerá suba de impuestos (las políticas de Macron orientadas en este sentido desató el conflicto de los "Chalecos amarillos"); y la implementación de nuevas tecnologías y la automatización en el mundo laboral, lo que provocará aumento del desempleo, allí la importancia y la necesidad de promover un salario mínimo para contener la población frente al "reinicio de la economía" mientras los ingenieros del sistema -GAFAM- diseñan el nuevo mundo del cual serán amos y creadores. 

En este escenario se producen las elecciones de EEUU donde la Guerra Civil está latente y puede ser un episodio más en la Guerra civil mundial pero con la relevancia de ser en el corazón del imperio, cuyas consecuencias exceden cualquier análisis. Donde al fin de la estatalidad, pérdida de autoridad de las naciones, al fin de la soberanía (S. Krasner), al fin de la historia (F. Fukuyama) y al fin del humano (Harari) allanan el camino de las elites globales para una sociedad global, posnacional, poshumana. No faltan aquí los intelectuales orgánicos del sistema que plantean ante este escenario la necesidad un Estado global que tenga la potestad y la autoridad global, de decidir sobre el Estado de excepción y hacer valer el nuevo derecho internacional. Un nuevo orden.

Hace a la política analizar la realidad y prever el futuro. La única certeza es que en el Pandemonio los diablos andan sueltos.