Afganistán: la estabilidad del caos

El informe del Equipo de Apoyo Analítico y Vigilancia de Sanciones de la ONU sobre organizaciones terroristas (ISIS, Al Qaeda) afirma que Afganistán sigue siendo la principal fuente de amenazas terroristas para los países de Asia Central y Meridional. Publicado el 14 de febrero de 2023, el documento subraya que la amenaza procede de "grupos como el Estado Islámico de Irak y el Levante-Khorasan (ISIL-X), al-Qaeda, el Tehrik-e Taliban Pakistan , así como el Movimiento Islámico del Turkestán Oriental/Partido Islámico de Turkestán, el Movimiento Islámico de Uzbekistán, el Grupo de la Yihad Islámica, Hatiba Imam al-Bukhari, Hatiba al-Tauhid wal Jihad, Jamaat Ansarullah y otros. Estos grupos gozan de una mayor libertad de movimientos en Afganistán debido a la falta de una estrategia de seguridad talibán eficaz".

El informe señalaba que el atentado del 5 de septiembre de 2022 contra la embajada rusa en Kabul fue el primer ataque contra una misión diplomática en Afganistán desde que los talibanes tomaron el poder. En diciembre, ISIL-X reivindicó atentados contra la embajada pakistaní y un hotel en el que se alojaban ciudadanos chinos.

"También ha amenazado con llevar a cabo ataques terroristas contra las embajadas de China, India e Irán en Afganistán", señala The Hindu.

La respuesta de Rusia

La persistente e incluso creciente amenaza terrorista que emana de Afganistán ha suscitado preocupación entre los países vecinos, incluida Rusia.

El director del Segundo Departamento para Asia del Ministerio de Asuntos Exteriores, Zamir Kabulov, declaró a The Week el 12 de febrero que Rusia estaba decepcionada por los talibanes. Citó como motivos de preocupación la falta de lucha contra los grupos terroristas, el aumento de la producción de drogas y la pésima situación socioeconómica del país. El diplomático ruso también insinuó que el gobierno talibán podría ser derrocado por "el pueblo del país".

Semyon Grigoryev, embajador ruso en Tayikistán, había declarado a RIA Novosti en una entrevista unos días antes que las promesas de los talibanes no se habían cumplido. Según él, sin embargo, la probabilidad de que "alguien se arriesgue a probar abiertamente la fortaleza de la frontera tayiko-afgana, que es simultáneamente la frontera sur de la CEI y de la OTSC" es extremadamente baja.

El 8 de febrero, el presidente ruso Vladimir Putin celebró una reunión sobre la cuestión afgana con los secretarios de seguridad de India, Irán, Kazajstán, Kirguizistán, China, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán.

Según el dirigente ruso, la dimensión afgana "es hoy doblemente importante", ya que, con el conflicto de Novorossiya como telón de fondo, Moscú no desea que "surjan más puntos de tensión en las fronteras meridionales de la CEI y de la OTSC".

El presidente de Rusia subrayó que Moscú "ha establecido contactos con los dirigentes de Afganistán en Kabul". "Hay buenos planes para grandes proyectos económicos, que podrían estabilizar la situación de la economía", dijo Putin. Sin embargo, en su opinión, la persistencia de la amenaza terrorista dificulta una cooperación eficaz con las nuevas autoridades afganas.

La naturaleza de la amenaza

Según Anatoly Sidorov, jefe del Estado Mayor Conjunto de la OTSC, el número de militantes del terrorista Estado Islámico está aumentando en el territorio de Afganistán. Dijo que hasta "6.500 militantes se encuentran actualmente en Afganistán, 4.000 de los cuales se concentran en las fronteras meridionales de Tayikistán".

El informe de la ONU sobre Afganistán señaló que el ISIS recluta a trabajadores migrantes de Uzbekistán y Tayikistán y que su aparato de propaganda opera en uzbeko, tayiko y ruso. Las principales células del ISIS-X se encuentran principalmente en las provincias orientales de Afganistán: Kunar, Nangarhar y Nuristan. Una gran célula opera en Kabul y sus alrededores. Se han encontrado grupos más pequeños en las provincias septentrionales y nororientales de Badakhshan, Faryab, Jawzjan, Kunduz, Takhar y Balkh. Balkh, provincia fronteriza con Uzbekistán y Tayikistán, es de especial interés para el ISIS, subraya el informe.

La ONU también señaló la presencia continuada de Al Qaeda en Afganistán.

Las relaciones de Afganistán con Pakistán han empeorado significativamente. Los talibanes surgieron con la ayuda de la inteligencia militar pakistaní en la década de 1990. Sin embargo, el Tehreek-e Taliban Pakistan, que cuenta con una gran población pastún (la base étnica de los talibanes), lucha ahora contra las autoridades pakistaníes. - Talibanes paquistaníes. Son autónomos respecto a los talibanes afganos, pero existen algunos vínculos entre ambas entidades.   El 30 de enero, militantes talibanes pakistaníes lanzaron un ataque contra una mezquita en la ciudad pakistaní de Peshawar. Murieron unas 100 personas.

Según Zamir Kabulov, Occidente (principalmente, Estados Unidos y Gran Bretaña) manipula a los "grupos terroristas en Afganistán".

El caos como constante

El 10 de febrero, el embajador ruso en Afganistán, Dmitry Zhirnov, declaró que Moscú y el gobierno talibán habían firmado un memorando relativo a la construcción de una central nuclear en el norte de Afganistán. Además, dijo, Moscú está dispuesto a proporcionar tuberías para la construcción del gasoducto TAPI (Turkmenistán, Afganistán, Pakistán, India).

El Emirato Islámico de Afganistán asistió al Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF) en junio de 2022. Ambas partes acordaron suministrar a Afganistán combustible, gas y cereales.

Rusia valoró positivamente el fin de la presencia militar estadounidense en Afganistán en 2021. Moscú se había mostrado anteriormente dispuesto a mantener contactos con los talibanes, a los que consideraba luchadores contra la hegemonía estadounidense, y sigue dispuesto a una cooperación pacífica. Sin embargo, tras haber sustituido a las autoridades proestadounidenses, el Emirato Islámico de Afganistán no ha resuelto sus problemas de seguridad. El país, agotado por la guerra civil y enfrentado a las sanciones y a la confiscación de las reservas de oro por parte de Estados Unidos y Gran Bretaña, no ha sido capaz de construir un Estado efectivo. "Los talibanes han demostrado que son una insurgencia eficaz, pero el funcionamiento del Estado es un desafío de otro nivel. Al retirarse de Afganistán, Estados Unidos ha dejado el país sumido en el caos.

Además de los terroristas, el gobierno talibán cuenta con la oposición armada que intenta obtener el apoyo de Occidente, los países de Asia Central y Rusia. Esta actividad no favorece ni la estabilidad en Afganistán ni la normalización de las relaciones entre los talibanes y sus vecinos.

Así, el mariscal Abdul Rashid Dustum, antiguo vicepresidente de Afganistán e influyente señor de la guerra que representa a la minoría uzbeka, ha pedido la transferencia de 40 helicópteros robados a las fuerzas antitalibanes (el Frente de Resistencia Nacional).  A su vez, los representantes del Frente Nacional de Resistencia en la prensa rusa afirman que los talibanes son socios supuestamente poco fiables para Moscú, pero no hacen ninguna promesa a Rusia ellos mismos.

Mientras la atención de los medios de comunicación mundiales se centra en la situación de los derechos de la mujer en Afganistán, la cuestión clave es la continua y creciente presencia terrorista en el país. Esto podría ser una fuente de amenazas adicionales para China, Rusia y los países de Asia Central. Los servicios de inteligencia estadounidenses y británicos seguramente no dejarán pasar la oportunidad de explotar este factor en la confrontación global con Moscú y Pekín.

Nota: El ISIS (Estado Islámico de Irak y el Levante), Al Qaeda, los talibanes, el Partido Islámico del Turkestán (antiguo Movimiento Islámico de Uzbekistán), Katiba Tauheed wal Jihad, mencionados en el artículo, son organizaciones reconocidas como terroristas en la Federación Rusa.

Traducción de Enric Ravello Barber