Occidente negocia con un antiguo líder de Al Qaeda para fortalecer la unidad del gobierno en Libia
La crisis actual en Libia empuja a occidente para realizar intentos de consolidar líderes políticos poderosos sobre el proyecto de “unidad de gobierno”. El principal criterio de tal implicación es la habilidad de estos líderes para proporcionar asistencia militar al gobierno respaldado por occidente. Las biografías de los líderes o incluso su participación en acciones terroristas son ignoradas. Por esto, la UE y los EEUU están intentando evitar la situación donde ellos estén forzados a desplegar una fuerza terrestre importante en la región.
El representante especial y director de la misión de apoyo de la ONU en Libia, Martin Kobler, está negociando con el líder político y militar libio, Abdelhakim Belhadj. Belhadj es el antiguo jefe del grupo combatiente islamista libio enlazado con Al-Qaeda, y un importante jugador en el derrocamiento apoyado por los EEUU contra Muammar Gadafi. Belhadj tiene su reputación por la participación en la yihad internacional, así como por jugar un papel clave en los atentados contra los trenes de Madrid en 2004, y es acusado por los investigadores de estar involucrado en el asesinato de dos políticos tunecinos por orden de la hermandad musulmana.
En la década de 1980, Belhadj y otros líderes de la LIFG se unieron a los talibanes en Afganistán. Siguiendo a la invasión de los EEUU en Afganistán, Abdel Hakim fue arrestado en Pakistán a finales de 2001, y entregado a los oficiales de seguridad de los EEUU, pero a diferencia de otros cautivos tomados en Afganistán, él fue repatriado a Libia dos meses después. Belhadj fue arrestado en 2004 en el aeropuerto internacional de Kuala Lumpur en Malasia. Entonces, él fue transferido a Bangkok y después puesto bajo custodia de la Agencia Central de Inteligencia de los EEUU, donde estuvo retenido en una prisión secreta en el aeropuerto. Regresó a Libia en la aeronave N313P, y permaneció en la prisión de Abu Salim durante 7 años. Estos desarrollos muestran claramente que Belhadj ha estado colaborando tanto con los EEUU como con los servicios especiales libios.
Belhadj es una figura importante en el gobierno de Trípoli y sus fuerzas juegan un papel importante en la coalición islamista “amanecer libio” (que incluye a la hermandad musulmana y a la Ansar al-Sharia de Al-qaeda), que actualmente retiene grandes partes de Trípoli. En el mismo tiempo, Belhadj es el denominado “hombre de negocios consumado” y controla una actividad de negocio en el aeropuerto internacional de Mitiga. Recibe un pago por el tráfico del aeropuerto, incluyendo suministros militares para el amanecer libio desde Qatar. Él es ahora de hecho propietario del canal de televisión Al Nabaa, que ha sido establecido como una rama de Al Jazeera en Libia, y la aerolínea, Libyan Wings. Belhadj también tiene intereses de negocio en la esfera de los medios de comunicación, tráfico aéreo, y seguro médico en Turquía y Túnez.
Las potencias occidentales han decidido involucrar a un terrorista y líder de una organización criminal internacional como un aliado para establecer en el poder al denominado “gobierno de unidad” de Libia, que casi no tiene apoyos en todo el país. ¿Realmente ellos creen que esto es un buen plan en favor de los mejores intereses para el pueblo libio?
Traducción para Katehon en Español desde Southfront.