Ruanda ha acusado a 22 oficiales franceses (entre ellos, el general Christian Quesnot, el general Jean-Pierre Huchon y el general Jean-Claude Lafourcade) de ayudar a planificar y
Ruanda vivió un genocidio el 6 de abril de 1994, cuando el avión que transportaba al presidente ruandés, miembro de la mayoría hutu, fue derribado. Todas las personas a bordo murieron.