La cancelación de Dante Alighieri
El 25 de mayo es el cumpleaños de Dante. Pero Occidente ya no celebra esta fecha.
Ya no está a la moda. ¿Por qué? Dante es el símbolo por excelencia de la poesía occidental, un clásico mundialmente famoso. De eso no cabe la menor duda. Pero su fama no ha salvado a este genio de la Italia medieval de la corrección política.
Cuando la Divina Comedia es leída por los defensores de los derechos humanos, todos ellos liberales y globalistas, tal parece que está llena está de elementos que no son compatibles con sus ideas. Y por eso pronunciaron la siguiente sentencia: Dante ya no se puede enseñar. Él se ha convertido en otra víctima de la revolución cultura liberal. Sus obras ahora solo podrán imprimirse censuradas y advirtiendo que su “contenido es políticamente incorrecto”.
A Dante se lo canceló por la siguiente razón:
El autor de la Divina Comedia puso al fundador del Islam en la parte más horrible del cosmos sagrado. Y los liberales, a quienes no les importa realmente el Islam o cualquier otra religión tradicional, terminaron por decir que esas palabras tienen un efecto muy negativo en la psique de los inmigrantes musulmanes. Por lo que es necesario protegerlos y evitar que eso produzca agresiones de su parte.
Todo esto parece absurdo, pero en nuestro mundo casi todo es bastante absurdo. Debemos acostumbrarnos a esto.
El mundo está gobernado por idiotas:
1. Primero por los que censuran: uno se imagina al viejo Soros y la pequeña Greta Tunberg hojeando juntos La Divina Comedia y subrayando los pasajes que resultan sospechosos;
2. Luego están los europeos, que ahora tienen que arrepentirse no solo por el colonialismo y el asesinato del drogadicto Floyd (a quien ellos no mataron), sino también por lo que escribió Dante;
3. Finalmente están los mismos musulmanes que se consideran como mentalmente débiles y que son incapaces de apreciar la distancia que los separa de la Edad Media cristiana de la Europa moderna, interpretando todo literalmente y reaccionando inmediatamente de forma brutal como si fueran maníacos incontrolables.
Pero el hecho de que Mohammed este en el infierno es solamente una excusa.
El libro de Dante fue la Enciclopedia de la Edad Media europea, un monumento donde está plasmada todas las ideas teológicas, filosóficas, poéticas y culturales de su época. Dante es el símbolo del espíritu cristiano de la Europa occidental, es quien glorifica el Imperio, la religión y el amor caballeresco. Muchas generaciones de europeos han inspirado sus ideales en la lectura de Dante. Es a través de él que los grandes héroes de Europa han construido su destino y sus vidas.
Fideli d’amore – “Fieles del amor”. Dante fue quién retrato los ideales de esta sociedad caballeresca propia de la élite aristocrática cristiana.
Y esa es la razón por la que hoy Dante está siendo cancelado. Él es el representante por excelencia de una Europa diferente, una Europa donde existían el espíritu y las ideas, la fe y el honor, el servicio gratuito y el gran amor. Los actuales gobernantes de Europa odian todo eso. Por eso prohíben a Dante, lo expulsan de sus planes de estudio, lo acusan de ser intolerante y lo desprecian.
Europa está destruyendo sus mismos cimientos, socaba sus propias columnas y arroja al mar las reliquias inmortales que sus genios dejaron antes de morir.
Nosotros los rusos no debemos seguir este camino. Debemos proteger no solo a nuestros grandes genios, sino también a los grandes pensadores, artistas y poetas que produjo Europa.
Rusia nunca ha sido un país europeo, pero siempre hemos podido apreciar la grandeza europea en campos tan diversos como el pensamiento, el arte y el genio. Aunque los europeos nunca nos han entendido, nosotros si los hemos llegado a comprender. Y valoramos sus grandes logros. Ahora que los europeos están lanzando a la basura el gran Dante, mientras su civilización se desmorona, es hora de alzarlo como nuestra bandera.
Dante es nuestro. Lo conocemos, lo honramos, lo leemos, lo enseñamos y lo entendemos. Rusia se está convirtiendo sin querer en el guardián y protector de los valores europeos, pero de los valores europeos reales y genuinos y no de aquellos que han surgido de la decadencia y la degeneración de su civilización. El liberalismo y la globalización no son todo lo que existe en Europa. Más bien son el espíritu de la Anti-Europa. Es por eso que destruyen las raíces de la misma Europa y desechan todo lo que es apreciado por el corazón europeo.
No debemos renunciar a nuestras raíces rusas, pero debemos venerar y honrar a los genios europeos.
L’amor che move il sole e l’altre stelle
Debemos ser fieles al Amor.
Pero, ¿una vez que el amor se desvanezca, cómo continuaran moviéndose el sol y las estrellas?
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera