Clinton acepta su nominación y nos advierte de que "EEUU es grande porque es bueno"

Viernes, 29 Julio, 2016 - 09:00

La ex secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, aceptó oficialmente ser la candidata a la presidencia del Partido Demócrata.

"Con humildad, determinación y seguridad infinita en el futuro de EEUU acepto su nominación", dijo Clinton durante la Convención Nacional Demócrata en la ciudad de Filadelfia.

Clinton aprovechó el reciente discurso de Donald Trump en su proclamación como candidato republicano, para tratar de mostrar una cara amable, moderada y optimista, en contraste con los sentimientos que despierta en buena parte del pueblo estadounidense, y en visible contradicción con su trayectoria política o al frente de la Secretaría de Estado, ambas caracterizadas por sus posiciones cercanas al "ala dura" del partido, o incluso a los neoconservadores, quienes ya le han expresado su apoyo.

Del mismo modo, Clinton quiso dar una imagen levemente reformista de sí misma, sobre todo para atraer a los partidarios de Sanders (visiblemente molestos con la parcialidad del aparato democráta a favor de la candidatura de Clinton, revelada por los correos hechos públicos recientemente por Wikileaks), y en general a los sectores de la población estadounidense más "izquierdistas", profundamete distanciados de una candidata perteneciente desde sus inicios al "establishment" y muy relacionada con la oligarquía.

Clinton utilizó buena parte de su discurso para menospreciar al candidato republicano: "Imagínenlo en el Gabinete Oval (de la Casa Blanca), enfrentado a una verdadera crisis; un hombre que puede ser batido con un mensaje de Twitter no es una persona a la que se le puedan confiar las armas nucleares", declaró Clinton.

Según la candidata demócrata, "la fuerza de EEUU no se basa en la ira", sino que "se basa en decisiones inteligentes, equilibradas, tomadas con sangre fría, con el uso preciso y estratégico de la fuerza; ese es el tipo de Comandante en Jefe que prometo ser", añadió.

Clinton, que acusó a su oponente de promover una retórica de odio y basada en las ofensas, dijo que se opondrá "a la retórica de odio, que separa a las personas", concluyendo que "a fin de cuentas todo se reduce a que Donald Trump no comprende que EEUU es grande porque es bueno".

Como contraposición a las políticas contra los inmigrantes promovidas por Trump, Clinton anunció la necesidad de llevar a cabo una reforma migratoria en EEUU. Además, afirmó que su "misión principal como presidente será la creación de más oportunidades y más buenos empleos con aumento de los salarios aquí en los Estados Unidos. Desde mi primer día en el cargo.", puntualizó.

Asimismo trató otros problemas que serán puntuales si gana la Casa Blanca, entre ellos la reforma migratoria, la lucha contra el cambio climático, un salario mínimo digno, cuidados de salud asequibles, entre otros.

También Remarcó que "vamos a hacer que esta economía funcione para todos, no sólo los que están en la parte superior".

El partido nominó a Clinton como candidata el martes, y su candidato a vicepresidente será el senador Tim Kaine.

Los estadounidenses están llamados a las urnas el 8 de noviembre de 2016 para elegir a su presidente.