Los medios de comunicación alemanes denominaron el 13 de marzo como "super domingo" en analogía con el "super martes" americano. Esta elección fue la primera evaluación del sentimiento en el país desde el comienzo de la crisis migratoria. El pasado año, las elecciones tuvieron lugar solamente en Hamburgo y Bremen, antes de la llegada de refugiados. Usando los resultados de estas elecciones, los expertos pueden evaluar el estado de ánimo general en la sociedad.
El partido euroescéptico "Alternativa por Alemania" (AfD), que se opone a la política migratoria de Angela Merkel, estará representado en los 3 Landtags, mientras que en Sajonia-Anhalt ganó cerca del 25% del voto. Ahora el partido estará representado en 8 de los 16 territorios federales alemanes, y complicará significativamente la formación de gobiernos locales. Los partidos "tradicionales" dijeron que no entrarían en coalición con AfD, indicando que en este momento, AfD es la única fuerza de la oposición.
El partido de Angela Merkel fue derrotado en dos de las tres elecciones federales. Tal resultado puede considerarse como el peor escenario posible en la víspera de las elecciones generales alemanas de 2017. En esencia, significa que la sociedad alemana de hoy está irritada hasta el extremo y no está preparada para apoyar la agenda liberal del gobierno. Estos resultados son una seria señal a Merkel, que intenta tomar parte activa esta semana en la preparación de un nuevo acuerdo de inmigración entre la Unión Europea y Turquía.