Los EEUU quieren que Skopje se transforme en un Kiev balcánico

19.04.2016

La república de Macedonia cayó víctima de la última desestabilización para el cambio de régimen por los EEUU contra ella, con “manifestantes opositores” provocando disturbios en la capital el miércoles por la noche e incluso saqueando una de las oficinas del presidente. Mientras que la tensión de la Guerra Híbrida se ha estado construyendo durante ya algún tiempo y fue descrita por el autor en numerosas publicaciones antes, la chispa que las puso en acción fue la declaración sorpresiva del Presidente Ivanov de amnistiar a toda la gente bajo investigación como parte del “escándalo de las escuchas”, con el líder macedonio remarcando que este es un paso necesario para mover al país hacia delante, y sacarlo del atolladero político. Los elementos de la revolución de color dentro del país explotaron con furia tras el anuncio, enfurecidos porque su intento de usar la recién creada y McCartesca “Oficina Especial del Fiscal” como un arma de caza de brujas antigubernamental ha sido frustrada dramáticamente. 

El enemigo interno

En respuesta al repentino estropicio de sus planes de “golpe constitucional”, los EEUU ordenaron a sus redes de “ONG” subordinadas y afiliadas a Soros, además de la “oposición”, para subir la temperatura contra las autoridades e iniciar el proceso progresivo de su segundo golpe pre-planeado en Guerra Híbrida, poniendo en marcha las ruedas de la revolución de color, como avance de lo que se espera que sea una campaña complementaria de guerra no-convencional. Un espectro impopular de “activistas” antigubernamentales -incluyendo “demócratas-liberales”, marxistas culturales, y Eurófilos (esencialmente todo en lo mismo)- inundaron Skopje en un frenético esfuerzo para convertirla en el Kiev Balcánico, pero una vez más, la profesionalidad de los servicios de seguridad y el patriotismo de la población, jugaron un gran papel en la mitigación de la intensificación inmediata de las hostilidades urbanas y en prevenir que se salieran de control. La amenaza todavía permanece y la intención de los EEUU para derrocar al gobierno macedonio está ahora abierta a la vista y completamente innegable para todos los observadores objetivos en este punto, pero los gamberros hasta ahora no tuvieron éxito en su plan para explotar su serie de provocaciones violentas y crearlo abiertamente para incrustarse en medio de la ciudad.

Habiendo tomado un día para evaluar los acontecimientos del 13 de abril, pueden verse a posteriori como una declaración no oficial de la segunda agresión de Guerra Híbrida por los EEUU contra Macedonia, presionada un poco antes de su fecha de lanzamiento original debido al anuncio sorpresa del presidente Ivanov, pero todavía bastante cerca de las elecciones del 5 de junio para ser capaz de desestabilizarlas. Washington convocó a los enemigos políticos internos del país en las calles, en un acto traidor de desafío antigubernamental para intimidar al resto del país y atrapar más apoyo para el movimiento entre los elementos más radicales de la sociedad. El breve periodo de disturbios también significó una señal para los albaneses wahabíes/irrendentistas que están bajo la influencia de EEUU y de Tirana (y para algunos de ellos, sus empleos directos) para prepararse y lanzar la siguiente etapa de la Guerra Híbrida. Esto podría vérseles probablemente en la realización de un ataque estilo Kumanovo que en su momento activaría los medios manipulados occidentales para narrar que la crisis macedonia es un “choque de civilizaciones” Huntingtoniano entre albaneses musulmanes y ortodoxos macedonios, que en cualquier caso complicaría el desorden político por la introducción de fuertes sombras de conflicto identitario.

Vecinos desagradables

A pesar de ser de importancia crítica para la estabilidad de toda la región balcánica, la república de Macedonia no puede depender de sus vecinos para ayudar en la superación de la desestabilización, todos ellos además de Serbia tienen intenciones hostiles hacia ésta. Antes de continuar, es necesario dilatarse un poco sobre la reacción proyectada de Serbia hacia todo esto, dado que es el primer país que sería más afectado inmediatamente si Macedonia es lanzada al caos y al menos un millón de inmigrantes, por consiguiente, explotarían este estado de cosas para inundar sus fronteras. Al mismo tiempo, sin embargo, Serbia no está en posición práctica para asistir constructivamente a su vecino del sur, e incluso si lo hiciera, esto sería todo pues de seguro que tal movimiento sería revertido instantánea y deliberadamente por Occidente y cada uno de los movimientos de “oposición” interna de los dos países, y transformadas en una lacrimógena concentración anti-gubernamental. Enfrentados con esta realidad y la prioridad subjetiva mucho más elevada de que Serbia coloca su propia estabilidad interna y la de República Sprska (que está siendo golpeada por los ataques institucionales de Sarajevo), Belgrado probablemente limitaría cualquier apoyo potencial a Skopje hacia el ámbito diplomático-informacional.

Grecia:

Para dirigirse a lo desagradable del resto de vecinos de macedonia que creen que tienen una participación en la desestabilización del país y potencialmente incluso la disolución final, es necesario, como primero y principal, hablar sobre Grecia, que ha levantado tensión bilateral recientemente por la repetida permisión de los intentos de invasión de inmigrantes organizadas por ONG contra la frontera macedonia. La continuación “de la disputa nominal” es lo que  tiene la culpa por el entusiasmo de las autoridades griegas para subvertir a sus vecinos del norte, creyendo que si la presión masiva incurrida por esta oleada humana puede tener éxito en las autoridades de cabecera, e instalar una marioneta del régimen en su lugar, tal como el pro-EEUU de Zoran Zaev, el nuevo “gobierno” puede “comprometerse” en el nombre constitucional de la República de Macedonia y por tanto satisfacer la antigua voluntad de Atenas. Para cumplir la misión en que está obsesionada desde hace más de dos décadas, algunas autoridades griegas están utilizando a miles de inmigrantes de oriente medio que están entrando en las fronteras del país como “armas de migración masiva” contra Macedonia, anticipando que pueden ser empleados (tanto figurada como literalmente) como carneros de embestida para presionas la agenda de cambio de régimen de los EEUU y tangencialmente logrando sus propios auto-intereses en el proceso.

Bulgaria:

Los otros dos vecinos que están interesados en la caída del estado macedonio son Albania y Bulgaria, cada uno de los cuales tiene sus propias aspiraciones “grandes”/irrendentistas que promover. Hace cerca de un año atrás, durante los últimos disturbios importantes de guerra híbrida en el país, el autor escribió sobre cuanto aquellos dos estados estuvieron equilibrados para explotar las desgracias de Macedonia en la búsqueda de la separación y división geopolíticamente entre ellos, tanto por las esferas de influencia formales o de facto. Al día siguiente, el ministro de asuntos exteriores ruso, Sergei Lavrov, advirtió a sus homólogos albanés y búlgaro contra la persecución de esta malintencionada conspiración, y justo después de poco tiempo, la tensión entre estados se aclaró hasta un grado en que la frontera levantada de Bulgaria “anti-terrorista/anti-refugiados” se reveló como el instrumento de presión que el autor predijo en primer lugar. Todavía, a pesar de echarse atrás formalmente del intento de desequilibrar el estado y distraer estratégicamente a las autoridades macedonias, los elementos nacionalistas en Bulgaria, continúan dedicados la conversión de lo que ellos consideran despectivamente que es una extensión de su propio país en un absoluto protectorado o territorio re-anexado, y no puede rechazarse que presiones similares tales como la del año pasado se repetirán en el actual escenario. La cobertura mediática positiva de la “oposición” y cualquier elemento albanés extremista próximo, también funcionaría de un modo “más suave” pero similar en ayuda a la promoción de los objetivos últimos de Sofía.

Albania:

Esto trae el análisis en torno al examen del papel de Albania en toda la intriga, que es la más negativa de todos ellos. Entre su actual flujo de emigrantes y la disminución de las condiciones internas, la élite de Tirana está ansiosa para redirigir la animosidad creciente frente a sus gobernantes hacia la distracción conveniente de la promoción de la “gran Albania”. El año pasado, se informó que los terroristas de Kumanovo han llegado desde la provincia serbia de Kosovo ocupada por la OTAN, y en este tiempo se cree que algunos elementos políticos-insurgentes dentro del país tendrán el apoyo total tras el telón, del poder político albanés. Cuando llege el potencial para los terroristas wahabíes y las células del daesh para que crezcan sus cabezas en cualquier futuro conflicto, Tirana jugaría probablemente un papel de acompañante de todo esto por la permisión a su aliado turco para tomar la dirección en el manejo de este tipo de operaciones terroristas, justo como la experiencia de batallas pasadas durante la mitad de la pasada década contra Siria, y probablemente ofreciendo su territorio para este propósito. Además, los EEUU ya tienen una nueva rama de la organización terrorista esperando en los laterales para actuar, el “ejército nacional albanés”, que brotó en el Kosovo ocupado y convenientemente, en las palabras reportadas de uno de sus “comandantes”, “considera que la OTAN es su amigo”. El nexo terrorista albanés-americano-turco entre las áreas no administradas por Tirana de la visionada “Gran Albania” (El Kosovo ocupado por la OTAN y Macedonia occidental) definitivamente jugará un factor determinante en cualquier escenario futuro de Guerra Híbrida y presenta la mayor amenazada de todas a la estabilidad regional.

Caos a las puertas

Apuntando a la multipolaridad:

La república de Macedonia está literalmente en la vanguardia de la guerra de los EEUU en Europa, como el autor explicó en una anterior pieza para Katehon, relativa a la crisis de inmigrantes. Se recomienda que el lector revise la cita antes mencionada si ellos aún no están familiarizados con el análisis del autor en este tema, pero la idea general es que los EEUU están empleando “armas de migración masiva” para poner a la UE en un estado permanente cual tensión de Guerra Híbrida y facilitar mediante las revoluciones de colores, la remoción de líderes que tienen acuerdos pragmáticos con Rusia y China. En un nivel más regional, los EEUU están apuntando a las repúblicas de Macedonia y Serbia porque ellas son los estados clave del cuello de botella en el actual proyecto chino de la ruta de la seda, que si es completado, complementaría el actualmente suspendido oleoducto balcánico de Rusia y juntos crearían la columna vertebrar en infraestructuras de un futuro multipolar para Europa.

Maremoto regional:

La Guerra Híbrida en sí misma es desestabilizadora para cualquier país y región que la sufre desde sus más intensas manifestaciones, pero la forma más directa y debilitante del caos al que inmediatamente conduce es un flujo de inmigrantes / refugiados / terroristas camuflados hacia y desde los espacios de batalla. Esto toma una importancia particular en el presente día dado que la crisis de inmigrantes actual y la terrible advertencia en febrero del primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, al mundo sobre que “cientos y miles de extremistas entran en Europa bajo el disfraz de ser refugiados”. La república de Macedonia está literalmente en la línea del frente de esta crisis y ha permanecidos sorprendentemente fuerte en la faz de las arrolladoras cosas contra ella, pero se enfrentó al reciente inicio de la Guerra Híbrida dentro de sus fronteras y la posibilidad de disturbios de una revolución de color que la transforme en la guerra no convencional más grande posible, es incierto en este momento cuan efectivamente serían capaces de resistir.

Vulnerabilidades estructurales:

Las repetidas subversiones fronterizas de Grecia y la culpabilidad que algunas de sus autoridades gubernamentales y NGO alojadas, tienen en el empeoramiento de la crisis de inmigrantes y la concentración de sus elementos más desestabilizadores hacia el norte a Macedonia pueden ser tomados de forma esperada como un significado de que los servicios de seguridad harán su trabajo para cortarles los malabarismos de la naciente amenaza de revolución de color, apagando cualquier guerra no convencional que se les infiltre desde Albania o desde el Kosovo ocupado por la OTAN, y asegurando la frontera de una invasión total de inmigrantes. Es más, si Bulgaria una vez más decide provocativamente el envío de tropas a la frontera macedonia en un clímax rápidamente creciente de la situación, entonces podría tener el efecto de cercar y concentrar a las autoridades macedonias mucho más, y abrirse las vulnerabilidades estratégicas en uno de estos múltiples frente que entonces podrían ser instantáneamente explotados por EEUU y sus aliados según sus muchos escenarios planeados y previstos. El resultado final de un exitoso cambio de régimen en Macedonia sería un asalto como bárbaros del territorio del país y una sobrecarga incontrolable de hasta un millón de inmigrantes justo a través del corazón de los Balcanes centrales, precisamente en el momento en que los estados regionales finalmente habían empezado a tomar un suspiro colectivo de alivio acerca de que el peor punto de la crisis quedó tras de ellos.

Reforzando el frente:

Tratando con esta posible eventualidad, es necesario que las autoridades macedonias reciban algún tipo de apoyo multilateral físico de los mismos interesados que de forma más inmediata tienen algo que perder si el gobierno cae y se convierte en un felpudo para las “armas de migración masiva” de los EEUU para invadir Europa. Justo ahora, como el autor analizó previamente en un artículo para The Saker, el equilibrio del estatus quo en el cierre de facto del “corredor balcánico” está mantenido actualmente por el liderazgo conjunto austro-húngaro, que reunió a todos los estados balcánicos y les hizo pasar por alto sus riñas a favor de la prosecución de una solución colectiva y coordinada del problema que les molesta a todos. El modo más efectivo para responder proactivamente a las oportunidades de la incipiente guerra Híbrida en Macedonia que demolerá las “compuertas” fronterizas e inundará Europa con un incontrolable flujo de “armas de migración masiva”, es, para esta estructura temporal de seguridad conducida por Europa central, la toma en un papel intensificado (por invitación oficial de Macedonia, por supuesto) en patrullar la frontera griega y así dar a las autoridades más flexibilidad para responder a otras provocaciones de los EEUU.

Conclusión de ideas

Macedonia convincentemente parece estar al borde de una gran desestabilización, una segunda Guerra Híbrida que está apuntando directamente a su gobierno pero también está apuntada indirectamente a destruir las perspectivas que Rusia y China tienen para liberar a Europa progresivamente de la unipolaridad. Washington ha lanzado el guante, como se esperaba, en el uso de sus delegados para enviar un fuerte mensaje a Skopje de que sus métodos de seguridad democrática, frustrando la conjura del “golpe constitucional” de la “Oficina Especial del Fiscal” y en la protección de Europa de los estragos de la crisis de inmigrantes se encontrará con la respuesta más dura y asimétrica posible.

La creciente amenaza de que una Guerra Híbrida a escala total estallará en la república de Macedonia es muy alta, y el think tank Katehon con sede en Moscú, sugiere de forma prudente que las duras medidas antidisturbios sean implementadas inmediatamente para contener la amenaza de la revolución de color. Si las autoridades pueden conseguir el mango con que hacer frente a sus última desestabilización antes de que salga de contol, entonces, estarán en una mejor posición para responder a cualquier pronosticada “gran Albania” y/o ataques terroristas del daesh que puedan estallar antes de las elecciones anticipadas del 5 de junio. Si estas dos amenazas de presión interna pueden ser neutralizadas efectivamente, entonces Macedonia no será tan vulnerable a la subersión directa que sus vecinos albaneses, búlgaros y griegos están conjurando contra ella con la asistencia “dirigida desde atrás” de turcos y americanos. 

Si lo peor se vuelve realidad, entonces Macedonia podría beneficiarse mucho de la asistencia multilateral en reforzar su frontera con Grecia para que sus servicios de seguridad puedan reaccionar más fácilmente a las provocaciones internas que surjan, lo que habilitaría así al gobierno para reprimir cualquier disturbio desestabilizador interno, mientras confía en sus socios internacionales y también en sus interesados estratégicos directos de la protección de la frontera sur respecto de una invasión de “armas de migración masiva” contra todos ellos. Cuanto menos que el periodo de dos meses antes de las elecciones será absolutamente crítico para la estabilidad en los Balcanes y el resto de Europa, pero si la historia tiene algún indicio, entonces justo como hicieron hace un año más o menos, el pueblo macedonio tendrá éxito legendario en expulsar la amenaza de Guerra Híbrida que EEUU está una vez más incitando sobre ellos y en última instancia poniéndole al Tío Sam otro embarazoso ojo morado.