Mullah Abdul Qayum Zakir es considerado uno de los comandantes supremos de la organización. Hasta 2007 estuvo en la prisión de Guantánamo y después de su liberación se unió a los talibanes. Zakir emitió un mensaje en el que señaló la necesidad de una respuesta a los retos de la política interna y externa. Entre los 12 puntos del documento se indican las negociaciones con Occidente, la introducción de la ley de la Sharia, el uso de la estrategia militar y la coordinación dentro del grupo.
Además de los partidarios de las negociaciones de ese grupo, hay un sector que no está dispuesto a negociar. De esta estrategia ellos reconocen sólo la ley de la Sharia. Anteriormente, Zakir fue considerado como uno de los líderes que no está bajo el control del principal líder talibán, Mansour. Sin embargo, hace aproximadamente un mes, Zakir afirmó haber hecho un juramento de lealtad a Mullah Mansour.
Es probable que entre los talibanes haya un intento de reorganizar y fortalecer la organización, lo que puede llevar algún tiempo. Establecer un control será particularmente difícil en las organizaciones de base, ya que un conjunto de células usan la técnica de la "resistencia sin líderes", produciéndose las acciones tácticas por la propia decisión de los talibanes sobre el terreno. Además, existen divisiones étnicas y tribales dentro de los talibanes.
Todavía se encuentran en el país 10.000 militares de las tropas de Estados Unidos, además del despliegue de las bases de la OTAN. Los talibanes están en guerra contra ellos, ya que después de la ocupación del país en 2001, fueron apartados del poder. Durante los 15 años de guerra, miles de afganos han muerto a manos de los estadounidenses, entre ellos muchas víctimas civiles muertas por los ataques aéreos.
