Soberanía española y futuro geopolítico
Quienes vivimos en Occidente somos como reos con la venda puesta en los ojos. Aunque contamos con una mano libre para deshacernos del velo, ni siquiera existe ya entre la gente el deseo de hacer ese movimiento liberador. Para completar el cuadro, los habitantes de esta parte del mundo nos tumbamos tranquilamente sobre un polvorín a la espera de que alguien prenda la mecha. Una potencia no europea, la potencia norteamericana, parece haberla encendido ya. El problema es que bajo nuestros asientos no tenemos realmente pólvora u otras sustancias combustibles convencionales, lo cual ya sería de temer. Estamos hablando de armas nucleares.