49.000 niños nigerianos están muriendo de inanición
El Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (UNICEF) dice que unos 49.000 niños nigerianos podrían morir de malnutrición en el noreste del país con problemas este año si no se les proporciona ayuda humanitaria.
De acuerdo con un informe publicado por UNICEF, el jueves, unos 475.000 niños en toda la vera del lago de Chad "sufren desnutrición aguda", debido a la sequía y al terrorismo de siete años por el grupo terrorista Boko Haram, afiliada al Daesh en el noreste de Nigeria.
El lago Chad se encuentra en el extremo sur del Sahara, limita con Chad, Camerún, Níger y Nigeria.
El informe agregó que de los cerca de medio millón de niños en situación de riesgo, los niños nigerianos, que viven en el estado asediado de Borno, en el corazón de Boko Haram, perderían sus vidas para el final del año si no reciben tratamiento y alimentos.
También pidió 308 millones de dólares para hacer frente a la crisis, y añadió que, hasta la fecha, sólo recibió unos 41 millones, un 13 por ciento de lo que se necesita para ayudar a los afectados en los cuatro países.
En Borno "ciudades y pueblos están en ruinas y las comunidades no tienen acceso a los servicios básicos," dijo UNICEF en el informe, añadiendo que casi dos tercios de los hospitales y centros médicos habían sido destruidos parcial o totalmente por los terroristas.
Las tres cuartas partes del agua e instalaciones de saneamiento responsables del mantenimiento de la rehabilitación también son necesarias, agregó.
De acuerdo con el informe, unos 2,2 millones de personas están todavía atrapadas en las zonas bajo el control de Boko Haram, a pesar de las agresiones contra-terroristas contra estos.
Se estima que 20.000 personas han muerto y más de 2,6 millones de personas se quedaron sin hogar desde el comienzo del terrorismo sangrienta de Boko Haram en Nigeria en 2009.
El grupo terrorista ha prometido lealtad a los terroristas del Daesh, que están causando estragos, sobre todo, en Siria e Irak.
Boko Haram ha extendido sus ataques desde el noreste de Nigeria, su bastión tradicional, a los países vecinos de Chad, Níger y Camerún. Los países de la región han creado una fuerza militar conjunta para ayudar a Nigeria a luchar contra la banda terrorista.