Golpe de Brasil: nueva grabación compromete al Presidente del Senado

Jueves, 26 Mayo, 2016 - 13:00

Si el pasado lunes salió a la luz una charla grabada entre el expresidente de Transpetro y el ministro interino de Planificación, Romero Jucá, en la que sugieren un pacto para detener las investigaciones del caso Petrobras, por el que también es investigado, y por las que Jucá se vio obligado a renunciar al cargo, una nueva grabación filtrada este miŕecoles por el diario Folha de Sao Paulo compromete al presidente del Senado de Brasil, Renan Calheiros.

En esta nueva grabación los protagonistas son el expresidente de la estatal Transpetro, Sergio Machado, y el presidente del Senado, ambos investigados por su presunta participación en la trama de corrupción de Petrobras. En el audio, Calheiros asegura estar a favor de modificar la ley que regula las llamadas "delaciones premiadas" de presos y que contemplan una reducción de la pena, hablando de frenar las "declaraciones premiadas de presos" que daban detalles sobre la corrupción en Petrobras.

Dichos acuerdos de cooperación judicial consistentes en facilitar información a cambio de una reducción de pena han sido un mecanismo recurrente en el marco de las investigaciones de la corrupción en Petrobras. Los implicados han revelado así cómo operaba la red y han permitido a las autoridades avanzar en las investigaciones y detener a algunos de los participantes de la trama.

Según el Folha de Sao Paulo, Machado sugiere un "pacto" para "pasar un borrador en Brasil" y Calheiros responde que "antes de pasar un borrador" son necesarias varias medidas, entre ellas frenar las "declaraciones premiadas de presos".

Por su parte, el jefe del Senado ha manifestado al periódico Folha de Sao Paulo a través de su oficina de prensa que la grabación "no revela ni sugiere" cualquier tipo de interferencia en las investigaciones del caso Petrobras, por el que se investiga a medio centenar de parlamentarios.

Las grabaciones que están apareciendo ponen en tela de juicio todavía más la legitimidad del Gobierno interino del presidente, Michel Temer, quien asumió las riendas de Brasil el pasado 12 de mayo después de que el Congreso decidiera suspender por 180 días a la mandataria Dilma Rousseff de su cargo para iniciar un juicio político con miras a su probable destitución.

La justificación de la oposición para aplicar un juicio político contra Dilma Rousseff es la supuesta violación de normas fiscales al maquillar el déficit presupuestario de 2015. Sin embargo, no se han demostrado pruebas contra la mandataria brasileña, quien ha reiterado su inocencia.