Los primeros 100 días del presidente Trump en el cargo
Una revisión geopolítica mordaz
Históricamente hablando, aparte del tratamiento totalmente bárbaro a su población indígena, Australia no es la típica nación que se viene a la mente cuando se trata de la hipocresía profunda como por ejemplo el comportamiento errático de Trump que ahora es claramente evidente para todos.
Para decirlo con suavidad, el Sr. Trump es el espejismo del pobre que se cree rico. El espejismo del estúpido que se cree inteligente. Y el espejismo del débil que se cree fuerte. Trump no es ni rico (en un verdadero sentido), ni inteligente, ni fuerte. En otras palabras, Trump es un espejismo de poder y nada más - ¡un perfecto tigre de papel! Y ahora, como han demostrado los acontecimientos de las pasadas semanas, también es otro traje vacío: Una filial que es propiedad absoluta de los oligarcas globalistas y mafiosos del Estado profundo en Washington, y más allá.
¡Pero este traje vacío es peligroso! Cuando combinas un narcisista de gatillo fácil a cargo del poderío militar de Estados Unidos, y ni siquiera hablo de nuclear, se tiene lo que tenemos hoy: sus misiles Tomahawk en Siria se basan en un pretexto totalmente falso a expensas de los niños, su imprudente ruido de sables en Corea, el inminente conflicto que se avecina sobre Irán, su increíble giro de 180 grados sobre la OTAN, la complacencia de un matón y asesino como Netanyahu con relación a su advenedizo yerno, Jared Kushner, y la lista sigue y sigue. Y sus despreciables primeros 100 días aún no han terminado.
Parafraseando a Garth Evans, ex-ministro australiano de Asuntos Exteriores, "Trump es manifiestamente el presidente más mal informado, menos preparado, éticamente discapacitado y psicológicamente mal equipado en la historia de Estados Unidos. Movido personalmente por el impulso, desprovisto de conocimiento o juicio, ha llevado a una administración que actúa hasta ahora claramente sobre la base de posturas, no de políticas. Tengo que decir que cualquier persona que apueste en que esta administración entregará resultados consistentes, coherentes, constructivos y decentes durante los cuatro años próximos está haciendo una apuesta grande ciertamente. Mi propia respuesta entonces al dilema de cómo Australia debe responder a todo esto, para expresarlo en términos de pegatina, es esto: Menos Estados Unidos, más Asia, y más autosuficiencia".
¿"Menos Estados Unidos, más Asia"? ¿"Más autosuficiencia"? ¿Quién es el "sujeto" en la "autosuficiencia"? ¡Como si los dos principales partidos australianos no apoyaran incondicionalmente el acuerdo multilateral de la coalición anglo-sionista para la cooperación conjunta en inteligencia militar y de rendición política completa para servir a la agenda anglo-sionista!
Otro ex-ministro australiano de asuntos exteriores, Bob Carr, ha declarado públicamente que Israel controla la política exterior de Australia. Hay demasiados políticos australianos que acogen a Israel, muy evocador del modelo sionista de Washington. El primer ministro de Australia, Malcom Turnbull, es un ex-CEO de Goldman Sachs. El sionista Rupert Murdoch controla los medios de comunicación y está en el consejo de Genie Energy que está perforando petróleo en el Golán de Siria. Otro ex-ministro de Relaciones Exteriores, Kevin Rudd, le fue tendida una trampa por los sionistas, que después de unos tragos fue capturado manoseando a mujeres.
Al igual que en EEUU y Europa, el sionismo se ha convertido en un cáncer en la estructura del poder político de Australia. ¿Cuándo se librará Occidente de este cáncer manifestado a través de la política y la economía? ¡¿Cuándo se desvanecerá la dependencia a los oligarcas judíos?!
Se dice que diagnosticar el problema correctamente es el 50% de la solución. Ahora que de modo correcto tenemos centrado masivamente el problema, ¿cuándo pondremos fin a la tiranía de los oligarcas sionistas? Esta tiranía es ahora evidente en todas partes de Occidente: La tiranía en el sector financiero. Tiranía en los medios de comunicación. Tiranía en la academia. Literalmente cual pulpo que extiende su poder, influencia y corrupción
La respuesta sigue siendo incierta. Pero la voluntad se está acumulando entre las masas del mundo. Según se Maquiavelo dijo: "Quien construye sobre la gente, construye sobre el fango". Y ¡yo digo que es la típica sandez elitista! Todo comienza en el nivel de la raíz. Nosotros el pueblo, nosotros conscientes y alerta, tenemos la responsabilidad de despertar a las masas. Ese proceso ha comenzado seguramente, ya sea en Rusia, o en los EEUU, o en Europa, y en nuestro caso resaltado, Australia.
Ahora que el Sr. Trump está exponiéndose plenamente a sí mismo como otro peón de los oligarcas criminales de la élite del poder de Washington, podemos poner desechar, de una vez por todas, ese ridículo argumento de que es un populista. ¿Es este comportamiento diferente de lo que habríamos esperado de la fraudulenta Hillary si hubiera usurpado la presidencia? Todos forman parte de la misma cábala malvada con variaciones sutiles y no tan sutiles. Gracias a la autoincriminación del Sr. Trump durante las últimas semanas, ni siquiera tomó 100 días para que las masas se dieran cuenta de esto. Sólo tenemos que cruzar los dedos para no iniciar una guerra termo-nuclear. Pero cruzar los dedos no es suficiente.
No hace mucho tiempo, Joe Scarborough de la MSNBC, reveló en su programa de televisión "Morning Joe" que durante una reunión de inteligencia, incluso antes de tomar el juramento de su cargo en enero, el Sr. Trump preguntó tres veces durante el transcurso de una reunión de 45 minutos acerca de la manera en que podría utilizar armas nucleares.
Cuando Garth Evans denomina correctamente al Sr. Trump como el presidente más impulsivo, desequilibrado, más mal informado, poco preparado, éticamente discapacitado y psicológicamente mal equipado en la historia de los Estados Unidos, no sólo debemos prestar mucha atención, sino también hay que tener planes de contingencia para enfrentarse a este demagogo. De lo contrario, lo que queda de la frágil paz y seguridad del mundo podría ser fácilmente destruido en unas pocas semanas. Estamos viviendo tiempos muy peligrosos.
Con toda honestidad, el anuncio de los artículos de juicio político (impeachment) en el suelo del congreso de los EEUU ahora debe convertirse en una necesidad.
Por último, los miembros del Boletín de los científicos atómicos ahora están informando al público que el Sr. Trump ha movido el Reloj del día del juicio final a 2,5 minutos de la medianoche.
A los pueblos del mundo, pero sobre todo a los partidarios de Donald Trump en cualquier lugar y en todas partes:
¡DESPIÉRTENSE!