Geopolítica de la seguridad XVI: aduana, la puerta giratoria de la seguridad nacional

19.07.2017

Aunque aduanas y fronteras son parte de una conexión común, las problemáticas son diferentes. La Aduana es una institución del Estado que tiene la cualidad de mostrar la realidad esencial del Estado argentino, que primero fue una Aduana y luego una nación.

Desde el ex asesor de la Aduana de Ezeiza que no hablaba castellano, Ibrahim Al-Ibrahim, hasta el ex carapintada Juan José Gómez Centurión nada ha cambiado mucho en la Aduana argentina. Los cambios importantes sucedieron durante el menemismo, el resto es pura continuidad, llamativamente criminal por supuesto.

1. La antigua Administración Nacional de Aduanas, un ente autárquico, se transformó durante el menemismo en la actual Dirección Nacional de Aduanas, dentro de la órbita de la AFIP, el organismo recaudador del gobierno nacional, perdiendo su anterior carácter de control para acentuar su carácter impositivo tras una argumentación de integración total de las responsabilidades impositivas y aduaneras.

2. Los delitos de narcotráfico cometidos a través de las aduanas nacionales son caratulados como contrabando agravado y se sustancian en el Fuero Penal Económico.

3. Sin embargo la Auditoría General de la Nación – AGN afirma que “la Aduana desempeña un rol estratégico en el resguardo de la seguridad nacional, la salud pública y el medio ambiente, vedando el flujo de mercaderías peligrosas o ilegales a la vez que garantizando el natural intercambio del comercio con otros países”.

4. La sobreacumulación institucional en los puntos de control (Migraciones, Aduana, Gendarmería Nacional, Prefectura Naval, Policía de Seguridad Aeroportuaria Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) entorpece el trabajo de visualización y control del tránsito de personas y mercancías.

En un informe del año 2014 la AGN dice que “las principales observaciones apuntan a una extrema debilidad de control sobre los pro-ductos que entran o salen del país, debido a inexistencia de procedimientos, infraestructura edilicia y operativa colapsada, escasez de personal y falta de capacitación, equipamiento insuficiente o inadecuado, demoras crónicas en el tratamiento de expedientes judiciales, aislamiento y obsolescencia informática”.

En diciembre de 2012 un cargamento de 1.230 kgs. de cocaína llegó al Puerto de Lisboa, configurando el decomiso más grande de la historia de Portugal. En el puerto de Campana nadie había visto la salida de las “peras blancas”.

La resolución 113/13 de la AGN contiene citas textuales de los jefes de las terminales del Puerto de Buenos Aires, que declaran que los escáneres son incapaces de diferenciar entre sustancias orgánicas e inorgánicas, por lo cual no es posible identificar la presencia de estupefacientes.

Son numerosas las deficiencias de personal, equipo, perros, vehículos, instalaciones, escáneres, balanzas, radares y procedimientos. Se implementan rutinas ad hoc, se carece de normativa interna y protocolos para proceder con la droga detectada, se carece de equipos para la realización de controles no intrusivos de mercadería, hay saturación de mercadería sin inventariar en los depósitos.

Falta coordinación y acuerdos bilaterales para lograr un tratamiento adecuado de la circulación de los barcos despachados por los países firmantes del tratado de la hidrovía (Argentina, Paraguay, Uruguay, Brasil, Bolivia), aunque todos sean miembros del Mercosur. El tránsito de mercaderías es libre y no hay normativa para la intervención aduanera, la regulación del transporte o el precintado de contenedores. La Aduana sólo puede intervenir mediante actuación judicial o en flagrancia.

Aduana no tiene lanchas o naves rápidas y debe pedir ayuda a Prefectura, que no siempre está disponible. Ninguna de las aduanas tiene conexión en línea con el Registro Nacional de Propiedad Automotor.

En síntesis el sistema aduanero argentino muestra inconsistencias económicas (falta de recursos y bajo presupuesto), institucionales (misión impositiva vs. función de control), operativas (falta de coordinación) y fundamentalmente estratégicas (ausencia de percepción sobre su rol social).

 

Miguel Angel Barrios 

Profesor en Historia y Magister en Sociología. Doctor en Educación. Doctor en Ciencia Política.

Ha escrito obras de investigación entre las que se destacan "Diccionario Latinoamericano de Seguridad y Geopolítica" (Director), "Consejo Suramericano de Defensa: desafíos geopolíticos y perspectivas continentales" y "Seguridad Ciudadana: de lo municipal a lo continental"

Profesor de Geoestrategia en la Licenciatura en Seguridad de la Universidad de Morón y creador de la Cátedra  en Seguridad Ciudadana  en la Universidad del Salvador, Buenos Aires. Dicta seminarios y cursos en Academias Policiales de América Latina y es Consultor en Políticas Públicas de Seguridad.

Coautor con Norberto Emmerich de "Geopolítica de la Seguridad en América Latina", que publicará la Editorial Biblos de Buenos Aires próximamente.

 

Norberto Emmerich

Doctor en Ciencia Política y Licenciado en Relaciones Internacionales.

Ha escrito "Una teoría política para el narcotráfico", "Geopolítica del Narcotráfico en América  Latina" y "Narcos en Buenos Aires: el caso de la Villa 31".

Profesor de "Seguridad Ciudadana" y "Política Criminal" en la Licenciatura en Seguridad y Políticas Públicas de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, México.

Fue Decano del Centro de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales, Quito, Ecuador y Coordinador General de Investigaciones de la misma Universidad.

Coautor de "Geopolítica de la Seguridad en América Latina" junto a Miguel Angel Barrios, que publicará la Editorial Biblos de Buenos Aires próximamente.