Davutoglu reconoció su participación en la conspiración

27.07.2016

El ex-primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu, ha admitido que dio la orden de destruir el Su-24 ruso en noviembre de 2015, según informa la edición turca del Hurriyet Daily News. Anteriormente, las autoridades turcas dijeron que antes del trágico incidente, el gobierno turco había cambiado las reglas sobre las respuestas a incidentes en el aire, dando autoridad a los pilotos para la toma de decisiones. Al mismo tiempo, Davutoglu reconoció que el 10 de octubre del año 2015 él mismo dio la orden de derribar a cualquier avión que violara el espacio aéreo del país.

Una trama que implica al primer ministro

Los pilotos que derribaron el avión ruso eran miembros de la red del predicador Fethullah Gülen, que trabaja para la CIA, y tomaron una parte activa en el intento de golpe en Turquía. De acuerdo con las autoridades turcas, la destrucción del avión ruso resultó ser una provocación deliberada, dirigida a enfrentar a las dos potencias en un momento en el que se había producido un acercamiento y Rusia ya estaba lista para hacer un paso de compromiso. La gestión de esta operación se llevó a cabo a través de los servicios de inteligencia estadounidenses, que usaron la red de Gülen y sus agentes en las Fuerzas Aéreas turcas.

Sin embargo, dicha provocación no habría tenido éxito sin el decreto emitido por el primer ministro del pais, sin el cual no se habrían dado las condiciones que permitieron a los pilotos-conspiradores tomar "sus propias decisiones". Anteriormente, hemos argumentado que Davutoglu era también un miembro de la red de influencia estadounidense en Turquía. "Katechon" ya escribió sobre el papel activo de Davutoglu en provocar el derribo del Su-24 ruso. Ahora, el ex- primer ministro, reconoció de facto el papel clave que jugó en la conspiración dirigida a socavar la posición de su país. De hecho, el neo-otomanismo que fue promovido por él, dio lugar a la retracción de Turquía en numerosos conflictos, contribuyendo al fortalecimiento del factor kurdo y del islamismo radical como resultado de la desestabilización de Siria, y así, desestabilizando la situación en el propio país, donde se ha intensificado la actividad del movimiento kurdo y de los extremistas islámicos.
 

La sexta columna en acción

La declaración de Davutoglu es una evidencia de que, además de la red pública de Gülen, también la llamada "sexta columna" y los agentes de influencia estadounidense están profundamente integrados en la élite gobernante e incluso en el partido en el poder en Turquía. De hecho, en relación con Davutoglu, los Estados Unidos nunca ocultaron que lo prefieren como líder turco en lugar de Erdogan. La última declaración de Davutoglu también tenía la intención de estropear las relaciones con Rusia y, de cara a la "sexta columna" rusa, darle excusas para detener un acercamiento con Turquía. Davutoglu es un destacado miembro de la conspiración cuyo objetivo era enredar a los dos países, el autor de la muerte de los pilotos rusos está vivo y en libertad.

Obviamente, Davutoglu no teme hacer una declaración en la víspera de la reunión en San Petersburgo entre Putin y Erdogan. Por un lado, le siguen apoyando en secreto Occidente, Qatar, y la red de los "Hermanos Musulmanes" en Turquía y en todo el mundo; por otro lado, Davutoglu también cuenta con el apoyo de los miembros del partido en el poder "Justicia y Desarrollo", y finalmente, el ex primer ministro debe de haber conseguido presentar su declaración a Erdogan como un intento de quitarle responsabilidad en la destrucción del avión ruso.